Pues si, vinieron mis padres a verme. Se me hizo raro verles aqui, y entre comillas, cambiar las tornas. Porque vienen de invitados a mi casa!!! Nos cundió bastante, y el viaje a Amsterdam, lo mejor. Menudo cumpleaños de mi madre.
Amsterdam es una gran ciudad porque entre otras muchas cosas es diferente. El centro, enorme, está plagado de canales, y la mayor parte de las casas, evidentemente con sus arreglillos, son de entre los siglos XVII y XIX. Un ambiente muy pintoresco para una capital europea, a la que hay que añadir los tranvías de un lado para otro y los ciclistas que van como locos! La zona de la estación central en hora punta es simplemente impresionante. Tranvías y ciclistas se cruzan como tal cosa, y nosotros, peatones, sin saber que hacer.
El primer día llegamos y dejamos las cosas en el hotel, o mejor dicho, el Botel, un barco anclado cerca de la salida al mar, y en pleno centro:La verdad es que me harté de hacer fotos del centro de Amsterdam, pero es que las casas, los canales, y los puentes merecen la pena. Según cuentan la ciudad tiene más canales que Venecia y mas puentes que París, y mirando el mapa no es de extrañar.
Pero no todo son canales y casitas. Tambien hay grandes museos, edificios monumentales, un mercado de flores (bueno, de tulipanes, que parece que Holanda no tienen otras), esculturas como recien sacadas del Alatriste y como no, Coffee Shops (que mira que hay...).
Y al lado de los edificios históricos, es más, en pleno centro, el barrio rojo, del que, lo siento chavales, no hay fotos. Y es que si no quieres problemas con un chulo es mejor que guardes la cámara al entrar. En su lugar os dejo fotos de las casas-barco, que, aunque con menos curvas, tambien son típicas de Amsterdam.
Por la noche la ciudad tambien mantiene su encanto, aunque ni mucho menos todos los puentes y las casas molonas están iluminadas. Aunque algunas no tienen precio.
Cenamos en un Indonesio, que son muy populares en Holanda por aquello de que tenian la exclusividad con las Indias en la ruta de las especias en el siglo XVI y tal. Estuvo bien. Al dia siguiente, entre otras cosas, hicimos el tipico paseito en barco por los canales. Muy chulo, y estupendo para ver los detalles que nos habiamos perdido desde tierra (como la casa con la fachada más pequeña de Amsterdam).
Los siguientes días toco ir visitar tambien Aachen, jeje, que no esta de más, y Dusseldorf, que pilla al lado del aeropuerto. Y a despedirse de los papis, pero hasta dentro de poco, que en seguida estoy en España. Por cierto, el próximo capítulo, que espero que sea mañana, y si no me echais la bronca será... CARNAVAL en COLONIA
1 comentario:
Niño, hay que ponerse al día que esto se te va de las manos y NO ACTUALIZAS!!!jeje. Mola el reportaje de Amsterdam. Me dejas con los dientes muy largos, me los voy a tener que limar. Lástima que no fuesemos. Pero Bélgica moló.Ale a cuidarse y a mantener esto convenientemente actualizado.
Aaaaadios
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